Los fideicomisos del Poder Judicial van a desaparecer gracias al Senado en la pasada noche del 24 de octubre.
Con una votación de 67 a favor y 49 en contra, el pleno del Senado ha aprobado tanto en términos generales como particulares las modificaciones al artículo 224 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, efectuando así la disolución de los fideicomisos del Poder Judicial.
Tras la medianoche, los senadores procedieron a votar detalladamente el dictamen, el cual ha sido remitido al Ejecutivo para su posterior publicación.
Este evento marca un giro significativo en el sistema de administración de fondos y recursos judiciales.
Si bien se plantea como una medida de austeridad, despierta cuestionamientos en torno a la independencia financiera y operativa del Poder Judicial.
Esta decisión ha encendido debates sobre la transparencia en la gestión de recursos públicos y sus implicaciones en la eficiencia de la administración de justicia.
Genera inquietudes sobre posibles limitaciones presupuestarias que podrían repercutir en la prestación de servicios judiciales eficaces y equitativos.
Así, se pone en entredicho la capacidad del sistema judicial para garantizar su autonomía y el acceso a una justicia imparcial y efectiva, generando preocupación en distintos sectores de la sociedad.