
ChatGPT, el compañero de reflexiones, Hace apenas un par de años, hablar con una inteligencia artificial (IA) sonaba a ciencia ficción. En PueblaNews.
Hace apenas un par de años, hablar con una inteligencia artificial (IA) sonaba a ciencia ficción. Hoy, más de 700 millones de personas interactúan cada semana con ChatGPT, convirtiéndola no solo en una de las plataformas tecnológicas de más rápido crecimiento, sino también en un espejo de nuestras inquietudes, aspiraciones y hábitos intelectuales. ¿Qué significa que cada vez más personas acudan a una IA no solo para trabajar, sino para pensar?
OpenAI acaba de publicar un estudio basado en 1.5 millones de conversaciones recopiladas durante tres años. Los datos revelan algo sorprendente: el 70 por ciento de las interacciones con ChatGPT no están relacionadas con el trabajo. Es decir, usamos la herramienta más para explorar, entender y orientarnos que para cumplir tareas laborales. La inteligencia artificial, lejos de ser únicamente un motor de productividad, se está convirtiendo en un compañero de reflexión.
El estudio identifica tres grandes usos: orientación práctica, búsqueda de información y escritura. La orientación práctica —aprender a hacer algo, recibir consejos, resolver problemas— se mantiene estable con casi un tercio de las conversaciones. La escritura, en cambio, ha caído del 36 al 24 por ciento en el último año. La búsqueda de información ha dado un salto notable: pasó del 14 al 24 por ciento. En otras palabras, ChatGPT comienza a desplazar a Google como espacio para descubrir y comprender el mundo.
Además, OpenAI clasifica las interacciones en tres propósitos: preguntar, hacer y expresar. Y aquí emerge un dato clave: cada vez pedimos menos que haga tareas por nosotros y más que nos ayude a tomar decisiones o a procesar ideas.
Esto plantea una pregunta de fondo: si dependemos de la IA para guiar nuestra forma de pensar, qué pasará con nuestro pensamiento crítico?Y otra más: ¿estamos aprendiendo más o solo pensando menos por cuenta propia?
ChatGPT está dejando de ser un simple asistente y está empezando a modelar nuestras decisiones, prioridades y formas de razonar. Quizá ahí resida el verdadero cambio: en un mundo saturado de información, la revolución ya no está en tener todas las respuestas, sino en atrevernos a formular mejores preguntas.
ChatGPT, el compañero de reflexiones.